En cuanto a la función de prevenir y promocionar la salud, dentro de las temáticas propias de este campo se encuentran los conflictos asociados a la asunción del rol del enfermo, adaptación al medio, trastornos emocionales derivados de la enfermedad y apoyo familiar, entre otros. La tarea es capacitar a los mediadores de las redes socio-sanitarias de la comunidad, para desempeñar funciones de promoción de salud y de prevención. Otra tarea es el analizar la problemática de las personas con conductas de riesgo, elaborando estrategias encaminadas a aumentar la oferta real de tratamiento a dicha problemática.
Por su parte, la investigación se desarrolla sobre todo en los contextos aplicados y, permite evaluar críticamente las investigaciones que de continuo se publican, para discriminar posibles nuevas aportaciones y determinar qué procedimientos de evaluación e intervención terapéutica son más adecuados para sus clientes.